2 Cro 36.6-8
1 En ese tiempo, Nabucodonosor, rey de Babilonia, se puso en campaña, y Joaquím le estuvo sometido durante tres años. Pero después cambió de actitud y se rebeló contra él.
2 Entonces el Señor envió contra Joaquím bandas de caldeos, de arameos, de moabitas y de amonitas; las envió contra Judá para aniquilarla, conforme a la palabra que el Señor había pronunciado por medio de sus servidores los profetas.
3 Fue únicamente por orden del Señor que sucedió esto en Judá, para apartarla de su presencia, a causa de los pecados de Manasés, por todo lo que él hizo,
4 y también por la sangre inocente que derramó, hasta inundar con ella a Jerusalén: el Señor no quiso perdonar.
5 El resto de los hechos de Joaquím y todo lo que él hizo, ¿no está escrito en el libro de los Anales de los reyes de Judá?
6 Joaquím se fue a descansar con sus padres, y su hijo Joaquín reinó en lugar de él.
7 El rey de Egipto no volvió a salir de su país, porque el rey de Babilonia se había apoderado de todo lo que pertenecía al rey de Egipto, desde el Torrente de Egipto hasta el río Eufrates.
2 cro 36.9-10
8 Joaquín tenía dieciocho años cuando comenzó a reinar, y reinó tres meses en Jerusalén. Su madre se llamaba Nejustá, hija de Elantán, y era de Jerusalén.
9 El hizo lo que es malo a los ojos del Señor, tal como lo había hecho su padre.
10 En aquel tiempo, los servidores de Nabucodonosor, rey de Babilonia, subieron contra Jerusalén, y la ciudad quedó sitiada.
11 Nabucodonosor, rey de Babilonia, llegó a la ciudad mientras sus servidores la sitiaban,
12 y Joaquín, rey de Judá, se rindió al rey de Babilonia junto con su madre, sus servidores, sus príncipes y sus eunucos. El rey de Babilonia los tomó prisioneros en el año octavo de su reinado.
13 Luego retiró de allí todos los tesoros de la Casa del Señor y los tesoros de la casa del rey, y rompió todos los objetos que Salomón, rey de Judá, había hecho para la Casa del Señor, como lo había anunciado el Señor.
14 Deportó a todo Jerusalén, a todos los jefes y a toda la gente rica –diez mil deportados– además de todos los herreros y cerrajeros: sólo quedó la gente más pobre del país.
15 Deportó a Joaquín a Babilonia; y también llevó deportados de Jerusalén a Babilonia a la madre y a las mujeres del rey, a sus eunucos y a los grandes del país.
16 A todos los guerreros –en número de siete mil– a los herreros y cerrajeros –en número de mil– todos aptos para la guerra, el rey de Babilonia los llevó deportados a su país.
17 el rey de Babilonia designó rey, en lugar de Joaquín, a su hijo Matanías, a quien le cambió el nombre por el de Sedecías.
2 Cro 36.11-13; Jr 52.1-3
18 Sedecías tenía veintiún años cuando comenzó a reinar, y reinó once años en Jerusalén. Su madre se llamaba Jamutal, hija de Jeremías, y era de Libná.
19 El hizo lo que es malo a los ojos del Señor, tal como lo había hecho Joaquín.
20 Esto sucedió en Jerusalén y en Judá a causa de la ira del Señor, hasta que al fin él los arrojó lejos de su presencia. Sedecías se rebeló contra el rey de Babilonia.